Si bien no existen datos fehacientes sobre el origen de esta fecha, lo cierto es que los derechos y reconocimientos por el trabajo administrativo de las secretarias —y también los secretarios— fueron reconocidos en Argentina en concordancia con el reconocimiento que la Asociación Nacional de las Secretarias de Estados Unidos hizo en 1942 a este oficio.
Esta fecha se celebra cada 4 de septiembre como homenaje y reconocimiento a las personas que están en estos puestos de trabajo. Su función resulta indispensable para cualquier institución que incluya tareas administrativas entre sus actividades.