La Caja tiene a su cargo la administración de los fondos jubilatorios de los profesionales abogados y procuradores de toda la provincia de Córdoba. Esto es posible, entre otras cosas, gracias a la articulación y buenas relaciones que mantiene con los Colegios de Abogados de capital y del interior de la provincia, ya que son éstos los que están en contacto con los profesionales de cada región.
Para el correcto funcionamiento de la Caja, sus representantes viajan periódicamente a los distintos Colegios del interior, con el fin de tomar contacto con la realidad de los afiliados que no viven en la capital, evacuar sus dudas, controlar cómo se realizan los aportes, cómo se está prestando el Servicio de Salud, si hay reclamos o sugerencias respecto a alguno de los temas en los que la Caja tiene incidencia. “…además de estar con el Directorio, suelen citar a los afiliados para que planteen sus dudas”, cuenta la Dra. Adriana Baduy, presidenta de la Caja. Y agrega que, además del Consejo de Administración, también realiza visitas el personal de Aportes y del Servicio de Salud de la Caja, para mantenerse actualizados sobre la situación y las necesidades de los afiliados del interior.
En lo que va de este año, se han realizado visitas a los Colegios de Río Cuarto, Villa Dolores y Laboulaye y a las delegaciones que el Colegio de Córdoba Capital tiene en la ciudad de Alta Gracia y en La Carlota. “Generalmente vamos una vez al mes a algún Colegio. Son once Colegios, incluyendo al de Córdoba. Pero al de Córdoba Capital vamos cada vez que hay juramento, que es una vez por mes”, cuenta la Dra. Baduy.
Consultada sobre el tema, la presidenta de la Caja comenta que “Siempre de los viajes se saca algo, redunda en mejoras para los Colegios y para la Caja, también (…) Se mejora el servicio, se ven los planteos, se corrigen cosas”, sostiene Baduy, convencida de que el intercambio y el diálogo permanente con los Colegios del interior es la mejor manera de mantener el buen servicio para sus afiliados.